Carta al Director, publicada hoy en El Mercurio de Santiago:
Hoy, nadie pone en duda que gran parte del crecimiento y desarrollo económico de Chile en las últimas décadas ha sido gracias a los 34 acuerdos comerciales, que le han permitido construir, según la OCDE, la red de Tratados de Libre Comercio más poderosa del mundo, con acceso para nuestras exportaciones a más del 80% del PIB mundial. Estrategia que nos ha permitido ofrecer nuestros productos a más de 65 economías y alrededor del 64% de la población global.
En este sentido, vemos con preocupación el avance de iniciativas que apuntan al establecimiento de medidas proteccionistas, pues envían señales confusas a nuestros socios comerciales respecto de nuestro compromiso con la liberación del comercio.
El aplicar en forma unilateral sobretasas arancelarias para el acero proveniente de China, nuestro principal socio comercial; o plantear restricciones al trigo importado, especialmente de otros socios estratégicos para Chile como Norteamérica (EEUU y Canadá), no apuntan a entregar una solución real a los problemas que afectan a estos sectores económicos. Es más, podrían abrir flancos que agudicen la problemática de estas industrias y producir externalidades negativas difíciles de dimensionar, afectando la relación con los socios estratégicos de nuestro país.
Es vital que la implementación de medidas restrictivas sea evaluada con mucha detención, sopesando tanto sus beneficios como posibles efectos, considerando si éstas solucionan realmente una situación comercial especifica, ya que, ello podría significar un riesgo para la economía general del país. Una alternativa podría ser el acudir a las cláusulas de solución de controversias de los propios acuerdos comerciales, a través de las cuales se potencia el diálogo y los acuerdos con los socios comerciales.
Iván Marambio Castaño
Presidente Frutas de Chile