Desde el año 2000, la producción de naranjas y pomelos del país se ha desplomado hasta un 80% y un 88%, respectivamente.
Según un análisis publicado recientemente por Daniel Munch, economista de la American Farm Bureau Federation, Estados Unidos ha experimentado un descenso sustancial de la producción de cítricos en las dos últimas décadas.
Este declive puede atribuirse a diversos factores, como las condiciones climáticas extremas, la prevalencia de la enfermedad del enverdecimiento de los cítricos y la conversión de huertos de cítricos para el desarrollo inmobiliario. Desde el año 2000, la producción de naranjas y pomelos del país se ha desplomado hasta un 80% y un 88%, respectivamente, provocando que Estados Unidos haya pasado de ser un exportador neto a un importador neto en lo que a cítricos se refiere.
En 1970, la producción estadounidense de naranjas representaba casi el 50% del total mundial, y el país era uno de los principales exportadores del mercado mundial de naranjas. En 2000, la cuota de mercado de Estados Unidos había descendido al 25%, y se espera que en 2023 sea de aproximadamente el 5%. La mayor parte de la cuota de mercado perdida por Estados Unidos se ha desplazado a Brasil (35%), China (16%) y la Unión Europea (12%). La situación es similar en el caso de los pomelos.
En 1970, la producción estadounidense de pomelos representaba el 75% del total mundial. Sin embargo, esta cifra había descendido al 43% en 2002 y se prevé que en 2023 sea sólo del 4%.
En la actualidad, la mayor parte de la producción mundial de pomelos, aproximadamente el 80%, tiene lugar en China, mientras que México y Sudáfrica aportan cada uno el 6% de la producción total. Debido a estos importantes descensos de la producción nacional, Estados Unidos depende ahora parcialmente de las importaciones para satisfacer la demanda interna, lo que ha provocado un aumento sustancial de los volúmenes de importación.
En 2000, Estados Unidos importaba cerca de 9 millones de cajas de cítricos frescos, cifra que se ha disparado un 320% hasta superar los 37 millones de cajas en 2022. Mientras tanto, las exportaciones han disminuido. En 2000, Estados Unidos exportó más de 26 millones de cajas de cítricos frescos, pero en 2022 esa cifra se había reducido a poco más de 12 millones de cajas, lo que representa un descenso del 53%. El país mantuvo un superávit comercial en exportaciones e importaciones de cítricos hasta 2014, pero desde entonces se ha convertido en un importador neto, con un déficit comercial superior a 25 millones de cajas en 2022.