Fuente: Syngenta.
La producción de cerezas va en alza y para la nueva campaña se espera alcanzar los 115 millones de cajas con las que la industria aspira a expandir su presencia en China. Por ello es fundamental proteger la fruta de enfermedades como Botrytis y Alternaria, asegurar su calidad para conquistar a esos nuevos consumidores, y mantener la excelente imagen entre los consumidores que ya conocen bien la cereza chilena, detalló Mundoagro.
Con la asistencia de más de 100 productores de las regiones Metropolitana y Sexta región que llegaron al Hotel Monticello, Syngenta dio a conocer su nuevo fungicida, Switch® One, la pieza que faltaba en su portafolio para tener un completo programa en la protección de las cerezas. Fiorella Gattini, ingeniera agrónoma y gerenta de desarrollo de Syngenta Chile, explicó que “Switch® es el fungicida más utilizado para el control de Botrytis en uva de mesa. Hoy con el crecimiento de hectáreas en cerezas, estamos ante un cambio productivo muy importante y nos estamos haciendo cargo de aquellos problemas que se pueden presentar en el campo y en la postcosecha”
Gattini comentó que cuando partió con las cerezas, el principal problema era Botrytis, pero con el tiempo se ha complejizado y, dependiendo de la temporada, distintos patógenos son los que afectan la producción. “Por ejemplo, en 2023 la pudrición gris fue la que más afectó postcosecha y a veces eso puede cambiar a otras enfermedades como Alternaria, Geotrichum o Cladosporium. Frente a estos cambios hemos desarrollado nuevas soluciones que tienen un mayor espectro y que controlan la mayoría de los patógenos. Así desarrollamos Switch® One”.
Sobre esta nueva solución, Gattini dijo: “Switch® One presenta una alta eficacia incluso en el control de aislados resistentes a otros fungicidas. Esto es gracias a su modo de acción que estimula la síntesis del glicerol y que, al acumularse, produce una hipertrofia que acaba por destruir las células del hongo. Este modo de acción bioquímico es específico de los fenilpirroles. Ataca al hongo en dos momentos diferentes de su desarrollo biológico: inhibe la germinación de las esporas y el crecimiento del tubo germinativo. La actividad de fludioxonil es por contacto y perdura durante bastante tiempo sobre la superficie de los vegetales y garantiza un nivel alto de eficacia”.
Claudia Muñoz, Crop Manager de frutales de Syngenta señalo, “Switch® One, es consistencia y eficacia, permite asegurar tus cajas exportadas, será la pieza clave irremplazable para asegurar la protección en cerezas. Destacamos su amplio espectro (Botrytis, Alternaria y Penicillium), más flexibilidad en los programas de manejo y seguridad de uso en campo, ya que tiene formulación comprobada. Sin riesgo de fitotoxicidad y es una excelente dupla con Amistar Top, que tiene amplio espectro en el control de enfermedades”.
Rodrigo García, director comercial de Syngenta Chile, afirmó que la innovación es parte de la genética de la compañía. “Contamos con un portafolio de diversos productos y de lo más amplio de la industria. Switch® One es la pieza clave, donde queremos estar y es parte de las estrategias que queremos seguir impulsando. Por lo tanto, todo complementa nuestra estrategia. Botrytis y Alternaria son las enfermedades que más afectan a las cerezas, lo que confirma que estamos en el camino correcto. No tengo dudas de que Switch® One será el producto más exitoso en el control de esta enfermedad”, afirmó.
Desafíos que presentó la campaña de cerezas
El encuentro contó con presentaciones de destacados expertos como Carlos Tapia, ingeniero agrónomo, asesor de cerezos y director de Avium, que realizó un “Análisis de los factores productivos de la temporada 2023-2024”. “Lo que más me llamó la atención de las últimas dos temporadas es que antes nos ubicamos en el top 6 de países productores de cerezas y en la última campaña pasamos al top 2. Superamos a Turquía, que produce casi 700 millones de kilos de cerezas. Es un gran mérito que nos ubiquemos en el top 2 desde el punto de vista productivo. En cuanto a China, las estadísticas dicen que este país tiene 200.000 hectáreas de cerezas plantadas, que podrían ir aumentando y acercarse así al top 3. En cuanto a exportación, Latinoamérica aporta el 53% de los envíos de cerezas y de ese 53%, el 52,85% lo representa Chile, por lo tanto, nos ubicamos en el primer lugar respecto a exportaciones”, detalló.
Tapia, además, comparó las últimas temporadas de cerezas respecto a producción y exportación con el hemisferio sur. “En las últimas campañas exportamos casi 414 millones de kilos, que representó el 96% de la exportación del hemisferio sur, por lo tanto, somos líderes indiscutidos. Desde el punto de vista del ranking varietal, Lapins es por lejos la variedad más amigable para el productor, más exitosa y que tuvo un aumento del 16% respecto al año pasado y participó con 35 millones de cajas de las 82 millones de cajas que exportó la industria. Tuvimos una baja productiva de Santina en la zona temprana, pero confío en se recuperará ya que hay muchas Santina plantadas en las zonas temprana, media y tardía que irán acortando esa brecha con Lapins. En el caso de Regina se seguirá moviendo cada año entre 15 millones y 20 millones de cajas”, añadió
El ingeniero agrónomo y cofundador de Diagnofruit, Héctor García, expuso sobre Control de pudriciones en cerezas: huerto y packing, unidos en el desafío. “En cuanto a lo que afectó la productividad, debido al cambio climático hoy tenemos hongos con mayor presencia como Alternaria. Cuando hace seis años comenzamos a estudiar Alternaria en cereza había solo algunas publicaciones y hoy esta enfermedad está presente en países como España y EEUU. El cambio climático es un gran problema porque aumenta los riesgos de enfermedades conocidas y aparecen aquellas que no habíamos visto antes, como Alternaria”, agregó.
El ingeniero agrónomo explicó que la microbiota será un tema clave en la protección de la planta. “Será una forma de enfrentar de forma más sustentable y sostenible las enfermedades, lo que incluye ciertos microorganismos que elevan la resistencia de las plantas, pero todavía hay mucho que aprender”, destacó.
Respecto a las enfermedades que más afectaron la reciente campaña de cerezas, García detalló que Botrytis dominó la temporada con un 34%, según la muestra que analizaron en sus laboratorios “Alternaria se situó con el 24%, Geotrichum con el 17% y algunas levaduras, como Aerobasium, con 16%, que no es menor. Son difíciles de controlar, no tenemos antecedentes en cuanto a tecnologías”, indicó.