La Dirección Económica de la Cancilleria, conocida como Direcon, pasó hace poco más de 2 meses a ser, la Subsecretaria de Relaciones Económicas Internacionales, para conocer más sobre esta nueva subsecretaria, su trabajo y sus desafíos, ASOEX conversó con el Subsecretario Rodrígo Yañez.
El 1º de julio recién pasado la Dirección Económica de la Cancilleria dio un gran salto y pasó a ser Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales; y a contar de la misma fecha ProChile, es la Dirección General de Promoción de Exportaciones. Ambos cambios se realizarón en el marco del proceso de modernización de la Cancillería.
Para establecer la nueva institucionalidad, el Subsecretario, señala que “la Ley de Modernización de la Cancillería nos permitirá contar con un nuevo estatus político enmarcado en la jerarquía del Ministerio de Relaciones Exteriores, así como con una institucionalidad ágil, que permitirá articular de una mejor manera con los distintos actores para enfrentar los nuevos desafíos del comercio exterior”.
Destaca que la ex Direcon coordinó y formó los equipos negociadores que lograron concretar la red más grande y profunda de acuerdos de libre comercio en el mundo. Fue así que impulsó el comercio internacional de Chile a través de un trabajo permanente, tanto en la promoción de las exportaciones nacionales, como en la actualización y defensa de los derechos de exportadores.
Con estas bases sólidas y establecidas, es que la autoridad, asegura que la nueva institucionalidad “consolida una labor de varias décadas en materia de apertura comercial y promoción de nuestras exportaciones, representando asimismo una oportunidad para proyectar el trabajo futuro y los nuevos desafíos que imponen la revolución industrial 4.0 y los nuevos temas del comercio. En definitiva, el paso de ser Direcon a Subsecretaría reforzará ese valioso trabajo”.
¿Cuál es el impacto de este cambio en el ámbito internacional?
En un escenario desafiante para el comercio internacional, es necesario contar con una institucionalidad moderna y robusta que le permita a Chile defender el exitoso modelo de desarrollo de apertura económica, basado en reglas.
Chile, como economía pequeña dependiente del comercio exterior, tiene un rol que cumplir –y un ejemplo que dar– en la defensa del libre comercio y el multilateralismo. La creación de la Subsecretaría apunta precisamente en esa dirección.
¿En que se ha traducido el cambio en el funcionamiento de la ex DIRECON?
La Direcon en sus 40 años de vida, lideró una exitosa estrategia de integración y apertura comercial de Chile al mundo, convirtiéndose en la piedra angular de nuestro crecimiento y estrategia de desarrollo, como lo demuestra el hecho que hoy el 57% de nuestra creación, o Producto Interno Bruto (PIB) se explique por nuestro comercio exterior.
En lo operativo, convertirnos en Subsecretaría ha implicado el desarrollo de un nuevo organigrama, más acorde a los nuevos tiempos, la re estructuración de labores a través de la creación de nuevas divisiones, y una configuración más funcional y moderna para hacer frente a los actuales desafíos del comercio exterior.
¿Cómo influye la separación de ProChile? ¿Cómo será la coordinación con ProChile?
ProChile pasó a ser una Dirección General, estatus que le otorga mayor autonomía, flexibilidad administrativa y presupuestaria. Esto los compromete a entregar un mejor servicio a nuestras empresas exportadoras, especialmente a las pequeñas y medianas, que son los verdaderos motores de nuestra economía.
Considerando que el mundo de hoy avanza con fuerza hacia una nueva era digital, ProChile asume el desafío de la modernización estatal con el firme propósito de destrabar las barreras burocráticas y facilitar la incorporación de más empresas a nuestra red, digitalizando los sistemas de trabajo para ser más eficientes con la asignación de nuestros recursos humanos y financieros, y facilitar el trabajo con los stakeholders.
Chile tiene una amplia red de acuerdos internacionales y una de las funciones de la ex Direcon era negociar. ¿En quién recae ahora esta función y de qué manera?
La Direcon deja como legado una red de 28 Acuerdos Comerciales que hoy nos otorga condiciones preferenciales para acceder a 64 economías que, en su conjunto, representan el 86% del PIB del mundo.
A la nueva Subsecretaría le corresponderá continuar con la negociación e implementación de la extensa red de tratados de libre comercio, además de la coordinación y ejecución de la política del Gobierno en materia de comercio exterior y la defensa de los intereses de Chile en foros multilaterales, entre otras materias.
¿Cuáles serán las principales funciones de la Subsecretaria? Además de administrar los 28 acuerdos comerciales.
La Subsecretaría es el órgano de colaboración inmediata del Ministro de Relaciones Exteriores en materia de relaciones económicas internacionales, al que le corresponderá la coordinación con los órganos de la Administración del Estado con competencia en dicha materia.
La creación de la nueva Subsecretaría representa una oportunidad para desplegar un mayor rol articulador en la defensa de nuestro comercio exterior tanto a nivel internacional, como al interior del mismo Estado, reforzando así la política implementada hace más de tres décadas en materia de apertura comercial.
A diferencia de otros países, Chile no cuenta con un Ministerio de Comercio, sino con una Cancillería, con una Subsecretaría política y otra económica. Así el paso de ser Dirección General a Subsecretaría releva y potencia este rol asesor y coordinador.
¿Cómo se va a relacionar con el sector privado? ¿cómo se concreta la relación con el sector privado?
La relación con el sector privado ha sido, es, y seguirá siendo clave para el trabajo de la Subsecretaría, tal como lo fue con la Direcon. La Subsecretaría seguirá contando con las herramientas institucionales con las cuales contaba la Dirección Económica, entre ellas el Cuarto Adjunto para las negociaciones de los acuerdos comerciales, la mesa de propiedad intelectual, el Punto Nacional de Contacto (PNC), entre otras formas de contacto permanente para conocer los requerimientos del sector privado en materia de política comercial.
Un área creada con la modernización y que potenciará la relación con la sociedad civil, es la División de Implementación y Difusión de los Acuerdos Comerciales, que será la responsable de estructurar estrategias para brindar a la ciudadanía información y transparencia sobre el proceso de implementación de los acuerdos, además de propiciar un diálogo permanente con stakeholders, incluidos gremios y sector privado. Esto implica un gran despliegue en nuestras regiones, el motor exportador de nuestras pymes.
¿Se ha tenido resultados desde el 1 de julio que la Direcon pasó a ser Subsecretaria? ¿Cuáles han sido los beneficios concretos?
Sin duda existe un cambio en el espíritu de los funcionarios que componen la institución ya que este nuevo rol como Subsecretaría es un reconocimiento al trabajo realizado durante décadas, posicionando a Chile internacionalmente y abriendo mercados para los productos y servicios de nuestro país en el mundo.
Los resultados se irán viendo en el mediano y largo plazo, pero es ciertamente visible en un mayor empoderamiento de una institución que ha cumplido una función clave en la política comercial de nuestro país.
¿Después de dos meses tiene cumplida las expectativas que tenía con este cambio?
Si bien dos meses es un período muy corto para hacer una evaluación, tal como se mencionó previamente, el sentimiento detrás de este cambio de jerarquía denota una impronta que se traducirá sin duda alguna en un mejoramiento de la labor que ya ejercía la Direcon.
Esta nueva institucionalidad viene a hacer justicia a un rol que la Dirección Económica de la Cancillería ejercía de facto desde sus inicios. Por lo tanto, sí podemos decir que se han cumplido las expectativas y esperamos seguir cosechando importantes logros para nuestro país en materia de comercio exterior.