Expertos de la Universidad de Massachusetts afirman que comer fresas podría ayudar a las personas a manejar las condiciones agravadas por los estilos de vida modernos inactivos y las dietas altas en azúcar y grasa

La prueba tenía como objetivo ayudar a las personas con enfermedad inflamatoria intestinal, que incluye la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. Se cree que la afección afecta a unos 3 millones de estadounidenses, más de 300,000 personas en el Reino Unido y 85,000 australianos.
Según un artículo publicado en dailymail.co.uk, las fresas restablecen un equilibrio saludable de bacterias en el intestino y reducen los síntomas en ratones con enfermedades incurables, halló la investigación.
Los expertos de la Universidad de Massachusetts afirman que comer fresas podría ayudar a las personas a manejar las condiciones, que según ellos se ven agravadas por los estilos de vida modernos inactivos y las dietas altas en azúcar y grasa.