Las compañías navieras que prestan servicio en el tercer puerto de contenedores del norte de Europa, Hamburgo, se preparan para nuevas huelgas tras el fracaso de las negociaciones salariales del reciente fin de semana.
Las negociaciones entre la patronal portuaria alemana y el sindicato de estibadores ver.di terminaron sin resultado el sábado, después de 10 horas de conversaciones. El sindicato calificó de “insuficiente” la oferta de la Asociación Central de Empresas Portuarias Alemanas (ZDS).
“Esta oferta está muy por debajo de la protección salarial real exigida por ver.di, a la vista de la actual tasa de aumento de precios del 7,9%, y es por tanto inaceptable para los empleados”, dijo la negociadora jefe del sindicato, Maya Schwiegershausen-Gueth.
La tercera ronda de negociaciones, que comenzó el viernes, fue precedida por una huelga de advertencia de 12.000 trabajadores portuarios de Hamburgo, Bremerhaven, Wilhelmshaven y Emden durante el último turno del jueves.
Se trata de la primera acción industrial en los puertos alemanes en décadas y el negociador principal de la ZDS, Ulrike Riedel, la calificó de “no hacer justicia a la negociación colectiva”.
Dijo: “Tenemos un nivel salarial comparativamente alto en los puertos alemanes. En la última ronda de negociaciones, dada la desafiante tasa de inflación actual, hicimos una oferta que compensa las pérdidas de nuestros empleados en salarios reales. Esta oferta está en consonancia con muchos otros convenios colectivos actuales de ver.di. El hecho de que ahora se convoquen huelgas en el actual marco de crisis es totalmente inaceptable”.
Añadió que se esperaba “una gran oleada de buques retrasados” en los puertos alemanes en las próximas semanas, lo que añadiría más tensión a la cadena de suministro, y que la estrategia de acción industrial del sindicato era “absolutamente irresponsable”.
Tanto la ZDS como ver.di afirman que se acordará una nueva fecha de negociación “en los próximos días”, pero las navieras temen que el sindicato vuelva a convocar las llamadas “huelgas de advertencia” para aumentar la presión sobre los empresarios.
Los transportistas marítimos que utilizan los principales centros de contenedores de Hamburgo, en HHLA y Eurogate, tuvieron mucho tiempo para sortear la interrupción de la acción industrial el jueves, pero todo ello está añadiendo más presión a las operaciones de carga en el puerto.
Además, los dos mayores centros de contenedores, Rotterdam y Amberes, están muy congestionados y no podrán o no querrán gestionar las importaciones alemanas transbordadas si la huelga se intensifica.
Maersk dijo que sus centros de Bremerhaven y Rotterdam eran los “puertos más congestionados del norte de Europa” y que sus redes estaban operando “bajo una gran presión”.
Hapag-Lloyd dijo que la ocupación de los patios de la Terminal de Contenedores de Hamburgo (CTA) era del 90%, “principalmente debido a la descarga de buques de importación pesados y a la reducción de las tasas de recogida de importaciones”.
De hecho, un ejecutivo de un operador de alimentadores dijo a The Loadstar que Hamburgo estaba “sentada sobre una enorme pila de contenedores de exportación” que son una víctima frustrada de los envíos de las terminales que se ven abrumadas con cajas de importación.
“Hamburgo sigue siendo una pesadilla y ni nosotros ni los operadores de las terminales sabemos cuándo o cómo volverán a mejorar las cosas”, afirmó.