Prognosfruit 2023 fue celebrada recientemente en Trentino, Italia, reuniendo a más de 300 delegados del sector de la manzana y la pera de Europa y de otros países.
Durante las primeras sesiones de la conferencia, se dieron a conocer las previsiones de cosecha de manzanas y peras para la próxima temporada.
En 2023, la producción de manzanas en la UE se estima que disminuya un 3,3% en comparación con el año pasado, hasta un total de 11.410.681 t. Pese a la baja, la cosecha estaría en línea con la media de los tres años anteriores.
En cuanto a las principales variedades, Golden Delicious aumentará un 11,7%, cifrando 2.167.899 toneladas. Gala, la segunda variedad en importancia, crecerá un 4,8% (1.527.179 toneladas en total).
En tanto, Red Delicious e Idared, por el contrario, disminuirán su producción (-10% y -6,1% respectivamente).
Peras
Se estima que la cosecha de peras de la UE para 2023 disminuya un 12,9% respecto a la del año pasado, con un total de 1.745.632 T. Este descenso se debe a la fuerte disminución de la producción de Italia (-63% en comparación con 2022), así como a una reducción de los volúmenes de Francia y los Países Bajos (-28,6% y -3,1%, respectivamente).
En 2023, se estima que la producción de peras Conference aumente un 8%, alcanzando las 928.081 t. Por otro lado, se prevé que la producción de pera William BC disminuya un 36,8%, mientras que se prevé que la producción de Abate Fetel caiga en picada a 52.846 t (-69,3%).
Otros Mercados
Las tendencias europeas son similares a las de otros países del hemisferio norte, como China (cuya producción de manzanas se mantendrá estable en 37,2 millones de toneladas), mientras que EEUU espera una producción de 4,5 millones de toneladas (un 3,6% menos que en 2022).
Asimismo, se espera que la cosecha de manzanas de la India disminuya en más de un 30% (1,9 millones de toneladas en total). Se prevé que la producción de peras en EEUU disminuirá un 3,7% (502.000 toneladas en total), mientras que la de China aumentará un 10% (17,6 millones de toneladas).
Respecto a esta primera estimación, el secretario general de la WAPA, Philippe Binard, comentó: “La campaña se inicia sobre la base de una cosecha relativamente baja, la ausencia de solapamientos con el hemisferio sur, las existencias vacías de la campaña anterior y la renovación en curso de los huertos”.
“Habrá que seguir vigilando las condiciones climáticas, así como mitigar las plagas y enfermedades, al tiempo que se abordan cuestiones geopolíticas y de acceso a los mercados (…) Habrá grandes oportunidades para estimular el consumo de manzanas y peras la próxima temporada, al tiempo que se aumentan los precios para que se correspondan con la calidad y los beneficios medioambientales, nutricionales y para la salud de las manzanas y peras”, cerró Binard.