El experto de la Universidad de Liege en Bélgica,, estuvo en Chile como expositor en el XIV Seminario Internacional de Blueberries, destacando que el uso de bioestimulantes es tan antiguo como la agricultura misma, pero los altos estándares de calidad y la competitividad de la industria agroalimentaria actual, han llevado a intensificar la investigación de éstos para su mejor aprovechamiento.
Como aspectos generales, deducimos que los bioestimulantes son sustancias orgánicas que actúan sobre los procesos de desarrollo de las plantas, mejorando su crecimiento, aumentando su capacidad productiva y potenciando sus defensas contra enfermedades. Pero para conocer más en detalle su desarrollo e importancia en la fruticultura, el PhD en Ciencias y Biotecnología de la Universidad de Liege, Bélgica, Patrick Du Jardin, en entrevista con Simfruit, explicó el ámbito en que lleva a cabo sus últimas investigaciones.
El profesional estuvo en Chile en el marco de su participación en el XIV Seminario Internacional de Blueberries, celebrado la semana pasada en el Centro de Conferencias de Sun Monticello, contando con una masiva participación de esta industria.
¿Por qué las investigaciones se han volcado a los bioestimulantes?
Los bioestimulantes contienen sustancias cuya función es, como lo indica su nombre, estimular los procesos naturales para mejorar la captación, asimilación y eficiencia de los nutrientes, la tolerancia al estrés abiótico y la calidad de los cultivos.
Los bioestimulantes mejoran la tolerancia por estrés abiótico por ejemplo en condiciones de sequía, pueden ayudar a la planta en ambientes agresivos o poco favorables, así que eso es importante. Pero también mejoran la nutrición de la planta, ayudándola a utilizar de forma más eficiente los nutrientes y fosfatos que tiene disponibles, o incluso los fosfatos que no están a disposición, porque de hecho, la mayor parte del fosfato en el suelo no está en un estado que las plantas puedan utilizar y necesita ser solidificado y los bioestimulantes ayudan a ese proceso. Esta es un área activa de búsqueda y uso de bioestimulantes.
También hay indicaciones de que pueden modelar la fisiología de la planta de manera que su metabolismo puede ser influenciado y promover la formación de algunos componentes como fenoles, así que se puede pensar en usar estos bioestimulantes en mejorar la calidad final de la composición de las frutas.
¿Pueden los bioestimulantes ser utilizados en cultivos orgánicos?
Este es uno de los principales puntos, que la gran mayoría, sino todos estos bioestimulantes, son realmente aceptados en los cultivos orgánicos, y esa es una de las principales razones por las que se ve un incremento en el interés por estos productos, porque es un nuevo paradigma el cómo plantar la planta para que los niveles de estrés caigan al aplicar estos productos, que además son orgánicos y donde las plantas más vigorosas pueden también afrontar mejor las condiciones y estar más protegidas para defenderse mejor de las enfermedades que puedan afectarla, porque los bioestimulantes no atacan las enfermedades, porque si así fuese serían biocontroladores, sino que actúan para que una planta saludable pueda luchar mejor contra las enfermedades.
¿Qué le parece la realización de seminarios e instancias de intercambio de información como ésta?
Yo explicaré lo que son estos productos y lo que pueden hacer en las plantas y cuál es la situación en términos de investigación y desarrollo de productos, porque hay muy poca información publicada al respecto en arándanos. Hay un poco más de información en mejoras de la calidad en vid verde, e incluso lo que podría ser posible en otras especies de árboles frutales, pero específicamente en arándanos hay muy poca información.
Este seminario es una gran oportunidad para mí de aprender acerca de arándanos, y su mayor desafío para el desarrollo de éstos, aprender sobre los criterios y estándares de calidad y cómo esa calidad del fruto está relacionada con la nutrición de la planta. Creo que este es el típico punto donde los estimulantes pueden ser beneficiosos para interactuar con la nutrición de la planta ayudando a mejorar los niveles de calidad que dependen de la nutrición.
Fuente: SimFRUIT