New Zealand Apples and Pears (NZAPI) redujo la estimación de cosecha en más de un 20% tras el impacto del grave fenómeno meteorológico en la costa este de la Isla Norte
La previsión de la cosecha de manzanas y peras de Nueva Zelanda se ha revisado a la baja tras los efectos del ciclón Gabrielle, que azotó partes de la costa este de la Isla Norte a mediados de febrero. Aunque aún no se han completado las reestimaciones para la región de Tairāwhiti Gisborne, la cosecha total de Nueva Zelanda se estima ahora en 16,1 millones de cajas (equivalentes a 18 kg), un 21% menos que la estimación original de la cosecha total, que era de 20,4 millones de cajas.
“Como resultado de la tormenta, la cosecha de fruta de Hawke’s Bay ha disminuido un 33%”, dijo NZAPI. “Esto representa una reducción de 4,3 millones de cajas en la región de Hawke’s Bay. Las reducciones de la cosecha son en toda la gama de las variedades cultivadas en Hawke’s Bay”.
Hawke’s Bay es la mayor región productora de pomáceas de Nueva Zelanda, con cerca de dos tercios de la producción nacional. Las estimaciones previas al ciclón situaban la cosecha de Hawke’s Bay en 12,9 millones de cajas, lo que representaba el 63% de la cosecha total. A pesar de los graves daños y las devastadoras pérdidas sufridas por muchos cultivadores, NZAPI señaló que el impacto varió significativamente en toda la región.
“En la costa este, hay una clara distinción entre los bloques que han sido significativamente y gravemente afectados por la tormenta, y los bloques que están intactos (…) Para los bloques no afectados, el resto de la cosecha está bien encaminada, y las condiciones para el período de cosecha restante parecen buenas”.
Las principales regiones productoras de la Isla Sur, Central Otago y Nelson/Tasman, siguen experimentando buenas condiciones de cultivo y cosecha, según NZAPI, y van camino de cumplir las expectativas de cosecha previstas.