Los jóvenes llenarán el vacío dejado por los trabajadores tailandeses y palestinos que no pueden ingresar al país
El gobierno israelí ha firmado una nueva orden que permite que miles de jóvenes mayores de 18 años participen en la cosecha de cítricos ante la grave escasez de recolectores que enfrenta el país debido a la crisis del Coronavirus.
Con alrededor del 60% de la cosecha recolectada a fines de marzo, los productores dijeron que la medida ayudaría a miles de granjas dada la escasez de mano de obra, desde la introducción de restricciones a la circulación de los trabajadores tailandeses y palestinos una vez comenzado el brote.
Según los datos publicados por la Junta de Producción y Comercialización de Plantas, desde el comienzo de la crisis del Covid 19, a los 15.000 trabajadores tailandeses que han abandonado el país no se les ha permitido regresar, y otros 5.000 trabajadores palestinos enfrentan restricciones similares.
Todo esto coloca más presión al sector que antes de la enfermedad, ya enfrentaba a una gran crisis laboral, con estimaciones situando el déficit de trabajadores temporales en alrededor de 16.000.
Se requerirá que los trabajadores jóvenes cumplan con las estrictas regulaciones establecidas por el Ministerio de Salud para prevenir el contagio, incluido el mantenimiento de una distancia de 2 metros de los compañeros de trabajo, el uso de guantes y mascarillas y el lavado regular de manos.
Los voluntarios trabajarán por períodos alternos de 10 días para prevenir la contaminación cruzada. Además de los jóvenes reclutados, Israel ha tenido un aumento dramático en los voluntarios que no han recibido un sueldo debido al brote y prefieren contribuir a la sociedad en lugar de quedarse en casa.
Joel Silberman, director de la Nueva Guardia, una organización que tiene como objetivo fomentar la relación entre los agricultores y la sociedad en Israel, dijo: “Esta semana recibimos noticias muy importantes para todo el estado de Israel, el Ministerio de Educación ahora permitirá que los jóvenes de Israel puedan participar en asegurar los alimentos, frutas y verduras del país. Esto tiene una enorme importancia en una situación en la que los agricultores están experimentando una gran crisis laboral que amenaza directamente los cultivos.Esperemos que este movimiento también indique un cambio en la atmósfera y la búsqueda de soluciones para lograr el fin de la crisis”.