El Informe de Coyuntura Agroclimatica, correspondiente al mes de abril, y realizado por la Sección de Emergencias y Gestión de Riesgos Agrícolas del Ministerio de Agricultura, destaca que en lo que va del cuatrimestre de 2019, hay una predominancia de las anomalías negativas de precipitaciones en todo el país solo con la excepción de la zona Norte entre Arica y Parinacota y Antofagasta.
El documento indica que aparte de la zona central, en la que todavía predominaba la “estación seca” existe, a fines de abril, un déficit de precipitaciones hacia el Sur tan importantes como en Curicó (-89%), Chillán (-71%), Concepción (-82%), Temuco (-68%), Osorno (-71%), Puerto Montt (-56%), existiendo déficits menores en la zona Austral.
Se consolida presencia de El Niño débil a moderado
El informe precisa que de acuerdo a el pronóstico de la Dirección Meteorológica de Chile (DMC) el trimestre mayo-junio-julio estaría marcado por la consolidación de la presencia de un fenómeno de El Niño débil a moderado. “Con esto, se espera un inicio de invierno más seco de lo normal, sobre todo en la zona comprendida entre la provincia de Choapa y la región de Los Lagos. En tanto, para las regiones de Atacama, Coquimbo, Aysén y Magallanes se esperan precipitaciones en nivel “normal a sobre lo normal” , consigna el documento.
Respecto de las temperaturas, se espera una predominancia de temperaturas máximas por “sobre lo normal” en casi todo el territorio con excepción de algunos sectores de Ñuble a la Araucanía. En cuanto a las temperaturas mínimas se espera que sean sobre lo normal exceptuando el tramo comprendido entre el sur de la región Metropolitana y la Araucanía donde estarán entre “normal y “bajo lo normal”
Este pronóstico está basado en el análisis de 10 modelos tanto estadísticos como dinámicos y, en general, es coincidente con la tendencia de largo plazo de disminución de las precipitaciones y aumento de las temperaturas entre las regiones de Valparaíso y Los Lagos.
A partir del mes de abril la DMC empezó a implementar el pronóstico subestacional denominado S2S que, en esta oportunidad, incluye un pronóstico de precipitaciones para el mes de mayo. En él se advierte una suavización de la escasez de lluvias en algunos lugares del tramo Valparaíso-Los Lagos.
La Oscilación Antártica muestra un pronóstico marcado hacia un índice positivo en la primera quincena de mayo, lo que significa una probabilidad de menores precipitaciones en el sur de Chile (ver Figura 8). Esto no resta que se pudieran producir eventos de precipitaciones intensos de corta duración que no necesariamente contriburirían a reducir el déficit a largo plazo.
Respecto del Fenómeno de El Niño, el último informe consolidado por IRI-CPC/NOAA de mediados de abril confirma la permanencia del Fenómeno de El Niño al menos en lo que resta del año. Por otra parte, las cuatro regiones monitoreadas mostraron valores semanales cercanos a +1°C de anomalía. Se estima que los efectos del fenómeno serían acotados en lo que respecta a las precipitaciones, no así en el caso de las temperaturas máximas, que se han mantenido altas de acuerdo con las características del evento. Esta situación de las temperaturas tiene impacto en algunas variables importantes para la producción como es el caso de la acumulación de horas de frío en la producción de frutales de hoja caduca. También lo es para el comportamiento en altura de la “Isoterma Cero”, factor importante para la acumulación de nieve.